Ayer caminaba por un Centro Comercial, y me detuve a ver desde afuera de una librería algunas publicaciones evaluando la posibilidad de adquirir un libro nuevo.
Era imposible no observar una portada donde había un rostro tan particular, hermoso y muy sonriente pero que tenía un título deprimente... De ahí me dije de inmediato: "¡Qué título e imagen tan incoherentes!".
Aunque pudo haber sido un simple abordaje distinto y positivo a un tema difícil, o una estrategia de venta, pensé también que la verdad es que como seres humanos llegamos a ser - repetidas veces - como ese libro: demasiado incoherentes.
En mi país (Venezuela), el sistema de gobierno "socialista" que han intentado instaurar por más de 10 años, a algunos les parece bueno, y a otros bastante malo. Pero me ha llamado poderosamente la atención que en dicha gestión se hable de un "respeto y libertad absoluta a los medios de comunicación" y aún así se decida transmitir un "noticiero de la verdad" dos veces al día y en cadena nacional (emisión obligatoria en radio y televisión en todo el país). ¿No les parece incoherente? Así, poquito a poco, son más y más las cosas que se nos imponen y no hacemos nada al respecto.
Triste. Lo sé. Pero, ¿Qué les digo? En realidad, podemos abandonar a un niño recién nacido en un basurero y pensar que el mundo es miserable con nosotros. Podemos gritar fuertemente y sentirnos ofendidos cuando nos alzan la voz. Podemos ganar un premio (nobel) por la paz y estar apunto de desatar una guerra mundial. Podemos hablar de igualdad y tener más capital financiero que 50 familias juntas. Podemos decir que amamos y olvidarlo al mes siguiente.
¡Así somos!
Seguro quieren ver el libro del que les hablé al principio. He aquí:
Foto/portada del libro: Hombre sonriente.
Título del libro: Diabetes.
#WhateverCarla
